Cómo mantener la fruta fresca en su frutero
Fruta fresca: el tentempié sano y sabroso para toda la familia es tan popular ahora como lo era cuando yo era joven. A veces me cuesta animar a mi familia a picar fruta en lugar de alimentos envasados y poco nutritivos, es decir, la fruta fresca en la encimera puede animarles a hacer mejores elecciones alimentarias.
Es una buena idea hacer que estos tentempiés frescos sean fáciles de ver y coger, pero mantener el bol o fruteros y su contenido sanos es otra cuestión.
Hay muchos boles bonitos en el mercado y un frutero también puede servir como centro de mesa.
Consejos para mantener limpio y delicioso un bol de aperitivos de fruta o verdura fresca.
Cualquier frutero puede ser un recipiente para fruta fresca, pero los estilos que permiten una mejor circulación del aire alrededor, incluso debajo de la fruta, pueden ayudar a mantener la frescura.
Un cuenco de plástico o acero inoxidable tiende a hacer sudar la fruta, lo que puede acelerar el proceso de deterioro. Elija cerámica o preferiblemente malla metálica.
Coloca el frutero en un lugar visible y fácil de ver. No lo esconda en una parte desordenada de la encimera.
Lava el frutero al menos una vez a la semana, o más a menudo si es necesario, para reducir la presencia de moscas de la fruta y disminuir el riesgo de bacterias y moho. Puede ser necesario hacerlo más a menudo en cuencos que no permitan una ventilación adecuada. No hace falta mucho para que una mancha de fruta podrida en un plato afecte al resto del contenido.
- Controle el contenido a diario. Algunas variedades de fruta se desintegran más rápidamente que otras. Sustituya la fruta podrida para mantener fresco el contenido del cuenco.
- Menos (fruta) es mejor. Y actualízate a menudo. No optes por un bol grande que será difícil de manejar.
- Refrigera el frutero toda la noche. ¿Por qué dejar la fruta fresca a temperatura ambiente cuando todo el mundo duerme? Mantener la fruta fría durante la noche prolongará su vida útil.
En climas cálidos, donde las cocinas están considerablemente por encima de la temperatura ambiente, puede ser necesario mantener el bol refrigerado durante largos periodos cada día. En otras palabras, sácalo de la nevera sólo cuando se acerque la hora de la merienda o cuando los niños acaben de llegar del colegio.
Un surtido de pequeños paquetes de galletas o frutos secos mezclados con fruta también puede ser un regalo de bienvenida.
Lavar la fruta antes de ponerla en un cuenco puede iniciar el proceso de descomposición. Retire las etiquetas o pegatinas de la fruta y enseñe a su familia a lavar siempre la fruta antes de comerla.
Si en su cocina hace demasiado calor o aumentan los desperdicios de fruta, guarde el cuenco lleno en un estante delantero y central del frigorífico. Debe ser lo primero que vean cuando abran la puerta para echar un vistazo.
La variedad de frutas es clave, pero algunas requieren un seguimiento más estrecho. Las bayas, por ejemplo, se desintegran más rápidamente que una naranja.
Un limón puede animarles a añadir rodajas a su vaso de agua.
Alternativamente, un recipiente cubierto de fruta deshidratada o frutos secos puede proporcionar tentempiés saludables
